Mientras los mexicanos están ávidos de respuestas ante la crisis de tráfico que afectan a sus ciudades, al país han llegado más y más empresas que buscan una tajada del millonario mercado de soluciones de movilidad: monopatines, autos particulares, bicicletas y hasta helicópteros.
Entonces, cuando parece que ya no hay espacio para uno más se presenta una nueva opcion, Picap es la primera aplicación de origen latinoamericano en adoptar el modelo de Uber y darle un giro centrado en la motocicleta y ya desde hace 11 meses opera en la CDMX un programa piloto con más de 8 mil conductores registrados.
“No existen mercados saturados, lo que existe es falta de creatividad para ofrecer nuevas experiencias”. Dice Héctor Neira, fundador y director general de Picap.
Mediante su plataforma, usuarios fijan su destino y uno de los motociclistas de Picap acude por ellos, les proporciona un casco y los lleva a su destino, dando lugar a una de las obligaciones de transporte en las motocicletas.
La tarifa se establece desde un inicio del viaje y el pago se hace en efectivo, aunque en un futuro cercano la empresa abrirá la posibilidad de pago con tarjeta. La experiencia se completa cuando usuario y conductor califican al otro. Las comisiones que picap obtendrá serian de alrededor de un 15 por ciento aunque aun no esta definido, otras apps cobran de un 20 a 30 por ciento ofreciendo un servicio similar en donde la CDMX es conocida como la urbe con mayor caos vial a nivel mundial y esta app ayudaria a reducir el tiempo de traslado hasta un 50%.
“Nosotros estamos en un mercado en donde, a pesar de ser la misma rama de transporte, estamos atacando un segmento diferente. Para el súper empresario, por más que vaya tarde es más fácil que pida un helicóptero a que pida una moto. Pero si tú no eres el súper empresario y no tienes una tarjeta de crédito y no tienes los suficientes ingresos para poder tomar un coche, que sabemos es relativamente costoso, y tampoco no quieres tomar el transporte público, nosotros estamos ofreciendo algo que no están cumpliendo las otras aplicaciones”.
Partiendo desde 25 pesos, el bajo costo de los viajes en Picap radica en las más bajas cuotas de mantenimiento o de compra de las motocicletas comparadas con las de un auto, así como por su reducido consumo de combustible.
“Las estadísticas son las que nos hablan, el mercado realmente está encontrando que hay una oportunidad de transportarse en un medio mucho más fácil, rápido y barato. Nosotros tratamos de encontrar un híbrido perfecto entre el transporte privado y público. Estamos tratando de apoyar y crear un mercado en los estratos medios y bajos al ofrecer un producto mucho más acorde a sus capacidades económicas”, añade el directivo de Picap.
En Colombia, explica Héctor, la cultura de la motocicleta es una muy extendida por su masivo uso en los poblados, costumbre que con el tiempo se exportó a las grandes ciudades como Bogotá. Según el empresario, en aquel país se contabilizan nueve motos por cada auto, por lo que su uso en una aplicación de transporte fue un paso lógico.
Picap se costeo a través de sus tarjetas de crédito, hasta que lograron atraer la atención del ángel inversionista Fahim Saleh, quien les otorgó un capital semilla de 250 mil dólares. Saleh, de 31 años, es conocido en el mundo emprendedor por ser el fundador y CEO de Pathao, empresa tecnológica originada en Bangladesh que aglomera servicios de transporte, entrega de alimentos y paquetería, todo en motocicleta. En 2017, Saleh llevó este mismo concepto a la ciudad más poblada de África, Lagos, Nigeria, y le llamó Gokada.
Luego de la confianza que Saleh les proveyó a Héctor y Daniel, la empresa escaló de los dos hasta los 90 empleados en Colombia. Hoy, la compañía levantó capital por tres millones de dólares con la última ronda de inversiones liderada por Signia Ventures Capital, en Silicon Valley. Con esos recursos, la firma tiene la obligación de expandirse en la región. Hoy es México, Brasil, Argentina y Perú, y próximamente hará pruebas en Chile y Guatemala.